Tuvo como profesora a su ángel de la guarda
que le enseño que un fracaso no siempre es perder
[Un día te perdi, Dios vino y te llevo;
y me dejo en el alma una bomba sin reloj.
Te ame y te llore, te lloro y te amo hoy.
Pero la vida es fría y te empuja a seguir]






