PORQUERIA, yo porquería, vos porquería, él porquería y el otro de la china porquería también.
LLANTO. GRITOS. SOL.
Una princesa que huye desesperada a otro cuento de hadas, porque su príncipe resulto ser un sapo, que le meo los ojos y la dejo ciega temporalmente.
LLUVIA. RIOS. SANGRE.
Un don nadie común y corriente, tomando una latita de cianuro en la esquina con los pibes, total ¿Para qué vivir? Si a nadie le importa, ni siquiera a ellos mismos.
NOCHE. VACIO. SOLEDAD.
Una nena bien que llega a su casa, bien vestida, con el boletín perfecto, la sonrisa radiante pero la mente sucia, la mente podrida de saber que es tan impura como las prostitutas que trabajan a un par de cuadras de su casa.
RISAS. SUEÑO. OSCURIDAD.
Fantasías comprando el combo de suicidio dos por uno, desesperadas por dejar de existir en este plano terrenal y reencarnar en algo más que todo este rejunte de mierda en su máxima expresión.
BRILLO. ENIGMAS. TRAGEDIA.
Sombras alucinógenas que enervan corazones huecos, consumen neuronas y queman cerebros producto de la miseria, carenciados de paz con una necesidad ferviente de cariño y atención.
Doce de la noche, un paseo por Constitución .

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